Prepárate Para La Restitución

Esta es la tercera parte de una serie de mensaje en anticipación a dar las ofrendas de primicias. El primer mensaje nos hablo de seguir la dirección del Espíritu Santo. El segundo mensaje nos enseño a hacer las cosas a la manera de Dios.

En aquel tiempo devolveré yo a los pueblos pureza de labios, para que todos invoquen el nombre de Jehová, para que le sirvan de común consentimiento.

Sofonías 3:9 rvr1960

25 Y os restituiré los años que comió la oruga, el saltón, el revoltón y la langosta, mi gran ejército que envié contra vosotros. 26 Comeréis hasta saciaros, y alabaréis el nombre de Jehová vuestro Dios, el cual hizo maravillas con vosotros; y nunca jamás será mi pueblo avergonzado.

Joel 2:25-26 rvr1960

Muchas veces nos encontramos con personas con buenas intenciones. Pero ellos no necesariamente estan a la altura de la asignacion y lo que Dios quiere hacer.

Dios nunca te convocara a una cita y tener la intención de bendecirte en ese encuentro.

Las primicias no consisten en comprar un milagro. Mas bien tiene que ver con obediencia.

Dios te ha traído este mensaje y te convoco para que recuperes lo que has perdido.

Lo que Dios trae es añadidura. Dios te quiere restituir.

No podemos hablar de restitución sin antes entender el proceso de devolución. Devolver significa que recibas lo que antes tenias. Volver una cosa a quien le pertenecía. Tenemos que entrar en la condición espiritual donde podemos recibir lo que nos pertenece.

El mundo espiritual no pasa nada por alto. Todas las cosas tienen una causa y un origen. Muchas veces pedimos a Dios que nos devuelva algo sin nuestra alma no estar preparada.

El libro de Sofonías no es muy popular. Sofonías fue un profeta que ejerció su ministerio durante el reinado del rey Josías rey de Juda, cerca del año 624 AC. Esto es un asunto histórico y real.

A Josías le toco pastorear una nación que estaba fría, que había perdido su gloria y esplendor. Muchos dudaban que podían recuperar todo lo que Dios le había prometido. Pero Josías hizo un compromiso con Dios y dijo que iba a restaurar todo lo que no estaba funcionando porque si no lo hacia las promesas no se iban a manifestar. Josías arreglo el culto. Y muchos no estuvieron en acuerdo.

El tiempo del que habla Sofonías 3:9 es igual que estos tiempos. Cuando vamos al contexto histórico nos damos cuenta que hoy día sucede lo mismo que en aquella ocasión. Este verso tenia un carácter profético.

Primero, la pureza de labios indica que no son tiempos de estar hablando cualquier cosa. Nuestro lenguaje no debe ser de este mundo o de este sistema. No debemos auto-eliminar con nuestra boca lo que Dios profetizo. Por eso Dios dice que tiene que purificar los labios. Es necesario hablar lo que el Reino de los Cielos esta marcando. Aunque estes pasando momentos difíciles sigue confiando en Dios y mantén tu boca limpia y purificada. Esto es lo que Dios busca en estos tiempos.

Cristo esta con nosotros. Esto no significa que Cristo vendrá a hacerlo por nosotros. Más bien significa que Él estará mientras nosotros lo hacemos. Significa que pensamos y actuamos como Cristo actuaba y pensaba. Cristo tenia el corazón y la mente del Padre. Y nosotros debemos tener el corazón y la mente del Padre también.

Hay una expresión hebrea que Dios quiere que tu la interiorices:

GAM ZU LETOVÁ

ESTO TAMBIEN ES PARA BIEN

Esto es el pensamiento hebreo que ante cualquier situación difícil no se quejo. Es un pensamiento que dice esto también es para bien. Yo puedo no entenderlo pero GAM ZU LETOVÁ. El hebreo no se atreve a pronunciar una palabra negativa porque el dice como puedo yo ofender al creador diciendo que Él no sabe lo que esta haciendo o me ha descuidado. No importa como se vea la situación que este pasando, digo GAM ZU LETOVÁ. Porque lo que Dios permite que te pase, tiene un propósito para bien. El Apóstol Pablo lo dijo de esta manera: A todos lo que aman a Dios TODAS las cosas le AYUDAN PARA BIEN.

La prueba quiere hacerte cambiar tu lenguaje. Más recuerda GAN ZU LETOVÁ.

PERO, no es verdad que todo lo vemos bien. Entonces, Dios me enseño otra palabra:

KAL DEAVID RAJAMANA LETAV AVID

TODO LO QUE DIOS HACE DEBE SER PARA BIEN

Las frases se parecen pero no son iguales.

Esto no es lo mismo que GAM ZU LETOVÁ. Con GAM ZU LETOVÁ, aunque todo esta malo yo lo veo bien y yo digo esto también es para bien.

Pero, cuando yo digo KAL DEAVID RAJAMANA LETAV AVID, yo estoy diciendo aunque lo veo malo yo sé que todo Dios hace algo bueno.

El ejemplo que tenemos de KAL DEAVID RAJAMANA LETAV AVID, es Jesus cuando le pidió al Padre que pase de Él esta copa, pero hágase su voluntad. Jesus reconoció que no era algo bueno pero Él dijo que Dios haría algo bueno de eso.

Entonces como dijimos antes, sin devolución no puede haber restitución. Pero Dios dice que no nos devuelve nada si antes no aprendemos a hablar. El Padre nos dice que tenemos que hablar como Él habla.

Volviendo a Sofonías 3:9, la pureza de labios era para invocar el nombre de Dios. El problema no es que Dios no te oye. El problema es que lo has estado invocando con la boca sucia. Cuando hablamos de limpiar la boca es porque tu boca expresa lo que tu alma guarda. Tienes que ser un alma pura para que puedas invocar a Dios para que con corazón voluntario le puedas servir a Dios.

Hablamos bien para honrar a Dios y por honrarlo Él nos bendecirá. Esto no es lo mismo que hablar bien para ser bendecidos. No lo hacemos para que nos bendiga. Lo haces para honrarlo a Él.

Un nuevo lenguaje demanda compromiso para que invoquemos a Dios y le sirvamos con común consentimiento. No por miedo. No por obligación. Dios no quiere que aparentes ser un buen cristiano porque tengas miedo de irte para el infierno. Dios quiere que le sirvas aunque el infierno no exista, aunque el cielo no sea una recompensa. Dios quiere que le sirvas porque has reconocido que sin Él no puedes vivir y que tu alma depende de Él.

El principio es este: Si se nos limpia el alma, se nos va a devolver.

Las cosas que se te van a devolver es lo que esta alineado a tu diseño.

Pero hay un nivel mayor. Y es lo que dice Joel 2.

Hay una diferencia entre devolución y restitución. La restitución siempre trae consigo una porción extra. La Biblia establece la ley de restitución en Exodo 22.

Cuando alguno hurtare buey u oveja, y lo degollare o vendiere, por aquel buey pagará cinco bueyes, y por aquella oveja cuatro ovejas.

Exodo 22:1 rvr1960

La restitución descansa en un principio de justicia. El principio de justicia dice que tienes que devolverle lo que perdió, y también tienes que devolverle lo que dejo de ganarse por no tener eso que había perdido.

Lo que Dios dice es que llego el tiempo de tu devolución por cuanto has tenido pureza de labios, y me has invocado porque me amas. Pero si ya te han devuelto es necesario que te prepares para recibir tu restitución.

La dimension de la restitución que Dios te promete es que serás saciado.